Las naranjas y ese “Tómate rápido el zumo que se le van las vitaminas” de las madres es un concepto que a pasado de generación en generación, como las vitaminas al saltar del vaso de zumo recién exprimido a la mesa: imposible de eliminarse.
Beneficios
La verdad es que las naranjas tienen una gran cantidad de beneficios, que resumiremos a continuación por si quieres que refresquemos dicha información, querido lector/a. Lo dicho, al grano, los beneficios son los siguientes:
- Su inmenso contenido de vitamina C ayuda a reforzar el sistema inmunológico: en temporadas de frío nuestro sistema se puede debilitar y por ello consumir cítricos contribuye a recuperar un sólido y fuerte sistema inmunológico.
- Los 60 tipos diferentes de flavonoides y aceites esenciales ayudan a prevenir el envejecimiento de la piel: no es mala idea envejecer con una piel cuidada.
- Su alta cantidad de hesperidina contribuye a reducir el riesgo de sufrir un infarto.
- La naranja es un antioxidante natural que ayuda a la producción de colágeno, lo que permite obtener una piel más tersa y radiante: repetimos, envejecer con una piel cuidada.
- Es ideal para llevar una vida saludable: contribuye a la aceleración del metabolismo y la eliminación de grasas acumuladas. Y si a esto le añadimos hacer deporte de manera frecuente…
- Se ha demostrado que las naranjas son un fruto que contribuye a la eliminación de ácido úrico.
- En algunos casos ayuda a reducir la acidez del estómago y puede ayudar a curar úlceras.
- Su alto contenido en fibra, si se toma la pieza de fruta entera, es clave para ayudar en la digestión y luchar contra el estreñimiento.
Tipos de naranjas
El clima mediterráneo cálido propicia que se puedan encontrar naranjas en otoño, invierno y primavera.
Existen más de 300 tipos de naranjas, gran parte de estas son variedades que surgen en las distintas épocas del año. Este sería un post muy largo si describimos todos los tipos de naranjas. Por ello describiremos solo las más comunes en los supermercados y tiendas. En el ámbito comercial apenas se venden unas 30 variedades y sólo 12 son las más comunes en nuestra cocina. Esta docena de variedades se divide en tres grandes grupos varietales gracias al tipo de consumo que se le da: Navel, Blancas o Lisas y Sanguíneas.
- Navel: en inglés significa ombligo. La naranja tiene uno de los extremo rematado por una especie de cierre en forma de ombligo. Son frutos grandes, su piel es de tacto rugoso y con un grosor considerable, son carnosas con fibra insoluble, generosas para hacerlas en zumo. En España se consume la variedad de la navelina, con piel más delgada, muy dulce e ideal como naranja para mesa.
- Sanguíneas: la variedad más cultivada en España es sanguinelli, de origen israelí, apenas presenta pulpa, su zumo es rojizo y morado, su sabor es cercano a la fresa o frambuesa a causa de la presencia de las antocianinas. Se recoge a finales de invierno y se comercializa en primavera.
- Blandas o lisas: las más recomendadas para zumo, no presentan ombligo y su piel es lisa. La variedad que más se consume son las naranjas valencianas. Se empieza a comprar naranjas valencianas por ser la más apta para zumos, con un punto ácido y muy dulces.
Comprar naranjas valencianas
Las naranjas valencianas son conocidas por su delicioso sabor, su gran cantidad de zumo y sus múltiples propiedades debido a las características de la tierra, son las mejores frutas para servir en la mesa o para hacerlas en jugo o zumo.
Valencia tiene un clima mediterráneo ideal para el cultivo de esta fruta y la tierra es muy fértil. Además gracias a la labor de sus agricultores y el cuidado en sus cosechas, comprar naranjas valencianas es la mejor opción para este temporal de frío.
La naranja de Valencia es la favorita de todas las naranjas y, probablemente de todos las frutas y verduras.